Las oficinas, en la ciudad de Adana, deŞiar Rişvanoğlu, conocido abogado de derechos humanos y defensor de perseguidos kurdos en Turquía, así como de otras víctimas de la represión en su país, fue atacada por manos anónimas provocando destrozos de todo tipo. Siar es militante del DIP, organización trotskista de Turquía. Una nota, sobre los escombros, decía: “Si continúas molestando a las fuerzas de seguridad de nuestro glorioso estado, muchas otras cosas serán destrozadas y perdidas. ¡Cuidado con los pasos que des, odioso traidor!".
La procedencia del ataque es indudable. El gobierno de Erdogan, en retroceso ante la población, viene impulsando una feroz campaña chauvinista, como lo acaba de poner en evidencia la conversión de Agha Sofía, una reliquia arquitectónica bizantina, en mesquita.
Nos solidarizamos con Şiar Rişvanoğlu, los compañeros del DIP y todos los luchadores de Turquía.
20.07.2020